Fantasma del carbón en Zulia resucita con rostro chino de la mano de Arias Cárdenas

“Así como los derrotamos hace 10 años, los volveremos a derrotar”. Las palabras del activista, biólogo y profesor de la Universidad Bolivariana de Venezuela, Nicanor Cifuentes, junto a indígenas provenientes de la Sierra de Perijá, frente a la sede del Ministerio del Poder Popular para la Energía Eléctrica no son meramente poéticas. Lo dice a pocos metros de un piquete de la Guardia Nacional y a pesar de las llamadas realizadas por los directores del despacho para posponer la reunión “para evitar problemas”. Con la publicación del decreto presidencial No. 1.606 del 10 de febrero de 2015, firmado por Nicolás Maduro, se nacionaliza y retoma la explotación carbonífera, que PDVSA había abandonado en 2005 después de protestas en rebeldía a la decisión del presidente Chávez, que luego de suspender, enfatizó el respeto por la selva y el bienestar de los pueblos indígenas.

Ahora, el decreto se publica tras el anuncio de construcción de una planta carboeléctrica para generar 1000 megavatios de electricidad para el Zulia de parte de la estatal petrolera, que implicaría la extracción y consumo de tres millones de toneladas métricas del mineral, con las graves consecuencias producidas por la tala de árboles para campamentos y minas, así como la contaminación del agua y el aire. Los movimientos sociales, agrupados en el  (FREZ) se han levantado tras haber sido ignoradas sus sugerencias de usar gas natural para evitar los daños ambientales que ya se habían advertido -incluso oficialmente- y reimpulsar el Parque Eólico de La Guajira.

Historia reciente

En 2004 Chávez dijo que quería triplicar la producción de carbón en la región, para impulsar su desarrollo. La protesta de grupos locales por el derrame de 20 mil litros de diésel lo llevó a reconsiderarlo tras una avalancha de protestas. Dos años más tardes expresó que , rechazando la tala de selva y las enfermedades pulmonares producidas en la región, lo que repitió durante varias alocuciones, dando pie al concepto de ecosocialismo.

La moción fue , quien señaló el inmenso impacto ambiental y las bajas ganancias: 50 dólares por tonelada, contra los entonces 60 del barril de petróleo. Un informe de su despacho, de 2005, demostraba la contaminación localizada del aire y del agua con metales pesados en el río Guasare, con apenas una fracción del aprovechamiento de las minas de carbón, y que al expandirlo aumentarían los riesgos ambientales en toda la biota del río Socuy, que impactarían en los embalses Manuelote y Tulé, que sirven a la ciudad de Maracaibo. Pero también señalaba que este desarrollo generaría 33% de incremento en los impuestos recaudados por la gobernación del Zulia.

Viejos actores, nuevos proyectos

La explotación minera en Zulia data de 1987, con la apertura de Mina Paso Diablo y Mina Norte. Ambas a raíz de la creación de Carbones del Zulia por Fernando Chumaceiro, quien estaba al frente de CorpoZulia. De aquella época datan los proyectos de vías férreas, un segundo puente sobre el Lago de Maracaibo y un puerto de aguas profundas para trasladar el carbón hacia Europa y Estados Unidos. Así reza el libro “El Pozo Ilustrado”, editado por primera vez en 1983 por Petróleos de Venezuela (PDVSA) y que en su cuarta edición aparece firmado por Luis Guisti como presidente de la estatal petrolera, al referirse a la infraestructura necesaria en el capítulo del carbón, en su página 402.

Estas primeras minas eran operadas por las empresas Carbones del Guasare y Carbones de la Guajira, manejadas respectivamente por las transnacionales Peabody y Anglo American Coal con una minoría accionaria del Estado venezolano. Luego fueron nacionalizadas por Chávez, aunque la primera aún conserva el 48,37% de las acciones.

Los planes originales, que son parte del programa de Integración de la Infraestructura Regional Suramericana (IIRSA) y el Plan Puebla Panamá (PPP), se diseñaron para garantizar la provisión de materias primas de parte de Latinoamérica hacia Norteamérica bajo un plan de desarrollo que incluye el financiamiento de infraestructura de transporte, como denuncia la ONG de derechos indígenas Homo et Natura, liderada por el antropólogo y profesor de la Universidad del Zulia, Lusbi Portillo, en sucesivos artículos desde el año 2000 en webs como Rebelión, Aporrea y Soberanía, al señalar las incongruencias con la llegada de un gobierno socialista y la retoma de estos proyectos de la llamada IV República.

Ahora se proyectan tres puertos en lugar de uno: Pararu, Bolívar y Hugo Chávez, ubicado en Falcón. Esto según presentación en el seminario “Plan de desarrollo regional: soluciones creativas a los problemas del estado Zulia”, del ingeniero Ender Carrizo, Secretario de Planificación y Estadística de la Gobernación del Zulia el 10 de diciembre de 2014 en la Universidad Rafael Urdaneta, en Maracaibo.

Las denuncias de Homo et Natura y el FREZ apuntan a la acción de viejos actores a pesar de los cambios de gobierno. Uno es el del gobernador Francisco Arias Cárdenas, quien es señalado de resucitar el proyecto con el lobby del ingeniero Luis Soto Luzardo, como advierten en “Si explotamos carbón, quedaremos endeudados, sin patria y sin agua”. Cifuentes, quien también parte del Colectivo La Mancha, explicó en entrevista telefónica que el parque eólico está en Pararu, en el municipio Guajira, justo donde se construiría uno de los puertos de aguas profundas. Esta denuncia también en el informe “Extractivismo en Venezuela” de Laboratorios de Paz, en voz de un líder indígena.

Revelan fuentes locales que Soto Luzardo “ha ocupado puestos directivos de segundo nivel pero de importancia desde la época de Carlos Andrés Pérez”. Durante la visita del ministro de Ecosocialismo y Aguas, Guillermo Barreto, a la subestación de bombeo El Brillante y el río Escalante en 2015, es citado por la prensa como representante de Hidrolago mientras en 2011 como ingeniero del Ministerio de Ambiente para la construcción del nuevo dique de Manuelote. En 2005, fue nombrado Director Ejecutivo Nacional de CorpoZulia y un año antes fue ratificado como gerente en Enelven. Pero ya en 1998 aparece como miembro de la Fundación Paseo Litoral del Lago y según Gaceta Oficial No. 34.593, del 13 de noviembre de 1990, fue designado por el presidente Carlos Andrés Pérez como Director General de la Autoridad Única del Área del Proyecto Paso Litoral del Lago de Maracaibo, actual segundo puente sobre el Lago de Maracaibo, Nigale.

Resucita el carbón, se mueren los ríos

La lucha por los derechos de los indígenas data de 1992 con los inicios de la movilización y el estudio de Homo et Natura y el pueblo Bari por las repercusiones culturales y ambientales por las actividades de exploración de concesiones en sus territorios ancestrales, logrando detener la explotación que realizaba una empresa de nombre Maica.

Pero, 20 años más tarde, en diciembre de 2012, el entonces recién electo gobernador Arias Cárdenas habló de aumentar la generación eléctrica usando el carbón, con el que se producirían 1000 megavatios más que hacían falta para contrarrestar los apagones y enmarcado en el , que elevaría la producción de 7 a 12 millones de toneladas métricas para exportación, y adicionalmente produciría 3 millones para combustible. Una semana antes de las elecciones, Argenis Chávez, entonces al frente de Corpoelec, reveló que se construiría una carboeléctrica en el Zulia, en un acto político en el que entregó electrodomésticos y tres millones de bolívares para obras sociales. Aseguró el funcionario que esto sería en apoyo del Parque Eólico. PDVSA había anunciado meses antes que retomaría y expandiría la explotación carbonífera.

En entrevista para el programa “Vladimir a la 1” de Globovisión, , pero que si se retomaban las operaciones de las minas abiertas, se podría extraer carbón “de forma ecológica” para generar electricidad que el Zulia necesitaba para combatir los apagones. Rechazó las críticas de los ecologistas que se oponían.

Explica el que el Parque Nacional Sierra de Perijá, al que se refiere el mandatario regional, “es un espacio político-territorial, no la bioregión ni la clasificación eco-sistémica, que corresponde a toda la cordillera, que llega hasta el norte de la Guajira. Lo que él llama“pie de monte” en la cuenca del río Guasare, que abarca también el río Socuy, unidos por sus acuíferos subterráneos. Se confunden nombres administrativos con el funcionamiento biológico”. El ambiente no funciona con las divisiones político-territoriales.

Nace el FREZ

En el documento “Opciones energéticas para el Zulia”, solicitado por el gobernador Arias Cárdenas a ambientalistas locales y presentado en septiembre de 2014, refieren que al explotar carbón en la cuenca del río Guasare, donde ya hay minas, se afectarán también los ríos Cachirí, Maché y Socuy, con el que se une para formar el río El Limón, la más grande fuente de agua dulce del Lago de Maracaibo, “que es realmente un estuario, y la vía férrea acabaría con el 40% de la zona de desove de gran cantidad de especies acuáticas”.

Elaborado por Lenín Cardozo de Azul Ambientalistas, la directora de la Fundación Instituto Zuliano de Estudios Fronterizos, Esther Macías, el Director del Parque Zoológico, Leonardo Núñez, y en representación de los colectivos sociales: Lusbi Portillo, Nelson Muñoz e Ildefonso Finol, habría sido tomado con desagrado por el gobernador, pues en el mismo se recomienda usar Gas Natural en vez de carbón -aprovechando las inmensas reservas y la infraestructura gasífera- mientras se reimpulsa el Parque Eólico La Guajira que al finalizar sus diez etapas podría generar 10 mil megavatios (2 mil costa adentro y 8 mil costa afuera). Incluso recomiendan usar el coque residual que se acumula en los galpones del Criogénico de Jose como opción. Los movimientos de base proponen en el documento que en los espacios entre las torres eólicas se instalen paneles solares fotovoltaicos con tecnología del IVIC y usando como referencia la experiencia del “Sembrando Luz” de Fundaelec.

Entonces el gobernador dejó de dialogar con los ecologistas y movimientos indígenas, quienes decidieron conformar el Frente de Resistencia Ecológica del Zulia, que agrupa a 13 organizaciones izquierdistas de base que organizan asambleas populares. La primera realizada el 23 de marzo de 2015 (reseñada por el portal oficial Hoy Venezuela, impulsado por Faría mientras fue Ministra de Comunicación) en la Plaza Bolívar de Maracaibo donde . La segunda en Paraguaipoa, municipio Guajira, el pasado 10 de abril y la tercera frente a la sede del Ministerio de Energía Eléctrica, cuando lograron la reunión con directivos que trataron de suspender el encuentro.

En la segunda parte de este reportaje vea como PDVSA tenía planeado desde el 2011 la construcción de la carboeléctrica junto a la empresa china SinoHydro, con el trabajo, impulso y consenso del ingeniero Luis Soto Luzardo y la funcionaria de PDVSA, Rosalinda Sánchez, como actores esenciales.

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