Petróleos de Venezuela (PDVSA) manifestó interés en el mercado de combustibles para comprar 6 cargamentos de gasolina, por 300 mil barriles cada uno, y otros 3 de diesel, también por 300 mil barriles, tras la falla operativa que se registró la semana pasada en la refinería Amuay, parte del Centro de Refinación Paraguaná (CRP), reseño Reuters.
El ministro de Petróleo y Minería, Asdrúbal Chávez, había asegurado que la paralización de la refinería Amuay fue generada por una “extraña falla eléctrica”. Luego del incidente, PDVSA informó que en 48 horas sería solventada la falla que paralizó el proceso de refinación en la planta. Sin embargo, de acuerdo con la agencia de noticias Reuters, la refinería de Amuay no está 100% operativa.
Para el economista y calificador de riesgo Leonardo Buniak, la decisión de Venezuela de importar combustible es reflejo de la debilidad que viene afrontando. Según Buniak, entre 2012 y 2013 la balanza de pagos registró una caída por ingreso de exportaciones por 8 millones de dólares a pesar de que los precios del crudo se ubicaron entre $102 y $103 dólares por barril, lo que apunta a problemas de producción petrolera.
Vía Voz de América