Jeniffer López y Pitbull entre los invitados de la inauguración
El mundial en Brasil empezó como se esperaba: un acto inaugural deficiente y poco atractivo, la ausencia de las palabras de figuras políticas brasileras para evitar malos ratos, la polémica y lo mejor: ¡El fútbol!. Croatas y brasileros hicieron uno de esos juegos de lucha y emociones que vale más a veces que algunos encuentros plagados de calidad.
La selección anfitriona entró a la cancha como si de una batalla se tratara y, en la forma efusiva de cantar su himno patrio, se notaron las ganas de lucha en cada uno de sus integrantes. Los croatas, fríos, parecían no inmutarse y al arrancar el encuentro así lo demostraron. Al primer minuto ya su delantero Kovacic, titular porque Manzukic del Bayern Munich se encontraba suspendido, pateó al arco por primera vez aunque su disparo salió desviado. Nueve minutos más tarde una escapada de Olic por la banda terminó en autogol de Marcelo tras un centro rastrero que rozó Jelavic y desvío a su propia puerta el del Real Madrid. Los croatas silenciaban San Paulo.
Brasil no tenía fútbol y sólo Oscar era capaz de desequilibrar a la defensa de Croacia pero todo se resumía a centros aéreos que no llevaban peligro claro. En el minuto 20 Paulinho tuvo la oportunidad del empate pero su disparo frontal fue repelido por el portero Pletikosa. A los locales no le salía nada y hasta Neymar fue amonestado luego de golpear con su codo a Modric en un salto de cabeza en la media cancha.
El empate llegó cuando peor estaba Brasil. Un balón disputado en el centro del campo acabó en los pies de Neymar quien llegó al borde del área y disparó cruzado al palo izquierdo de Pletikosa para igualar el partido. A partir de ahí, Brasil fue superior y encerró a Croacia en su arco hasta el descanso.
La tribuna llena de brasileños estalló ante el primer gol
En la segunda parte el fútbol de ambas selecciones perdió intensidad pero apareció un japonés. Si ,un japonés para marcar la diferencia. El árbitro Nishimura se inventó una pena máxima sobre Fred que jamás existió y Neymar marcó el segundo de la canariña. Los reclamos fueron intensos pero a Croacia no le quedaba más que buscar el empate.
En el minuto 90, el portero Julio César evitó la igualada tras una gran parada a un fuerte disparó de Perisic. En la siguiente jugada, ya en tiempo de descuento, Oscar aprovechó un robo de Ramires en el centro del campo y en un rápido contragolpe anotó el definitivo 3-1 para los locales.
Brasil consigue ganar su primer encuentro bajo una gran polémica , igual que la organización misma del evento, y con Neymar asumiendo galones de líder y estrella de su equipo al marcar un doblete. Tres puntos importantes para la canarinha, sin embargo no puede olvidarse que para los brasileros, esta primera “feijoada” tuvo sabor a sushi.